jueves, 11 de noviembre de 2010

Ginkgo biloba.

La primera vez que vi este árbol fué hace muchos años, en el parque del Campillín en Oviedo. Me llamó mucho la atención porque sus hojas toman en otoño un amarillo dorado espectacular y por si eso fuera poco tienen una forma muy atípica, parecen mariposas... avanicos...Se sabe de él que es un fósil viviente, no hay más especies que la suya y lleva en la tierra millones de años.... además es un árbol muy longevo.